Beyond Fire~

Sunday, March 3, 2013

Capítulo 14.El último cañonazo.


La voz de Rosse pasa por mis oidos y se transforma en odio y rabia.Estamos las dos solas,ahora se decide todo.Me separo lentamente de Jake,girándome para ver a Rosse en los salientes de la montaña.Cruzada de brazos,su aspecto impecable me dice que no tiene ninguna intención de morir hoy.
Pero yo tampoco.
-El infierno es cualquier sitio en el que estés tú,Rosse-la frase sale sola,a la vez que mi sonrisa de medio lado se hace con el control de mi boca.
-Muy ocurrente-dice seria,llevándose una mano a su cadera,en la que tiene una bolsita de cuero con cuchillos.Rápidamente,coloco una flecha en el arco,apuntando hacia ella.Dispara primero,y el cuchillo roza mi brazo cuando me hecho a un lado.Mi flecha es esquivada con torpeza,y ambas nos miramos serias,como esperando un ataque.Es evidente que no queremos cometer ningún error ahora que estamos rozando la victoria con los dedos.
Permanezco quieta mientras salta al suelo y camina lentamente hacia donde estoy.
-No lo hagas más difícil,Selene-dice entre dientes,cogiendo otro cuchillo-No tienes ninguna oportunidad contra mí
-¿Y eso quien lo dice?-murmuro retrocediendo unos pasos,colocando una segunda flecha a la espera de ser disparada.
-Yo misma

Y dispara,rompiendo la cuerda de mi arco en dos.

Me quedo en blanco,eso no me lo esperaba.Sonríe con malicia al ver que me ha dejado desarmada y saca su último cuchillo,mientras mi mente se destroza en una búsqueda contrarreloj de algo con lo que defenderme.
Y lo encuentro pronto:La espada de Jake.
Esquivar el cuchillo mientras corro no es fácil,pero posible,solo corta algunos cabellos sueltos.La espada está en mis manos mientras ella recupera su arma,ahora estamos en las mismas condiciones.
-¿Qué decias?-mi tono de voz desprende un inexplicable orgullo en ese momento.Rosse aprieta los dientes y corre hacia mí,tirándome al suelo.Intenta colocarme el cuchillo en el cuello,pero el poco espacio de movimiento que tengo bajo ella me permite cortarle en el brazo.Grita,y su sangre mancha mi ropa.Es un corte profundo,incluso diría que he alcanzado hueso,porque la parálisis en ese instante me permite levantarme,apuntando hacia ella con la espada.

Sin embargo,me veo incapaz de hacerlo.

¿¡Porqué Selene,porqué!?Un simple golpe y volveré a casa,un simple golpe y todo habrá acabado.Y en ese preciso instante,la respuesta acude a mi mente.El motivo real por el que le tenía miedo a los Juegos,la razón por la que no quería matar a Jake y por la que nunca me voy a perdonar la muerte de Mitch,Laura,Caden,Alissa y Rubi:Porque no soy una asesina.
Rosse me mira atónita,tal vez preguntándose porqué no termino de una vez por todas con esto.
-¿A qué esperas?Hazlo.Hazlo y volverás a casa-dice entre dientes,apretando con fuerza en su corte.Pero sigo en blanco,odiándome por ello.He sobrevivido a todo esto...¿para arrepentirme en el último momento?Siempre he sabido que tengo algo de bipolaridad,lo cual se ha visto estos últimos días con mis altibajos sobre si ganaré o perderé.Y ahora que puedo decidirlo,no actúo.

Damas y caballeros,comienza la final de los Quintuagésimo Primeros Juegos del Hambre.


Reconozco esa voz.El vigilante gracioso de mi prueba llena el estadio con su anuncio...justo cuando todo empieza a temblar.
Rosse se levanta con torpeza,mirando a su alrededor.Los pájaros huyen a toda prisa del bosque,el cielo se nubla de repente con nubes de color plomo que desprenden destellos blancos:Se está desatando una tormenta.Y no de las suaves.
Lo que no puedo hacer yo,lo van a hacer ellos.
Rosse me mira,y antes de poder reaccionar,ataca de nuevo,esta vez cortándome en la mejilla.
Escuece,pero no voy a dejar que eso me venza.Levanto la espada y voy contra ella,pero he de admitir que mi experiencia con la espada es nula,por lo que esquivarla le resulta fácil.Ataca de nuevo y el corte que me produce va desde mi hombro bueno hasta la clavícula contraria.Sus movimientos son rápidos y limpios,y eso me permite comprobar una cosa esencial en ellos:Sigue un patrón.Para ataques bajos carga con la izquierda,pues controla mejor su zona derecha,que es la que usa para los ataques altos.Mi madre siempre me decía que tenía una capacidad inmensa para captar cosas con rapidez,por ello sacaba buenas notas sin tocar un libro al bastarme con la explicación en clase.Lo que nunca pensé es que llegaría a salvarme la vida,cuando veo el lugar perfecto para atacarla:su pierna derecha.
Tal es la fuerza del impacto que la atraviesa.Rosse grita,llora,emana sangre mientras se desploma.
Ahora
Levanto la espada con fuerza y voy a arremeter contra ella,cuando algo me detiene.
Un aullido frente a mí:uno de los lobos que acabó con Jake.

Me quedo petrificada,moviéndome milímetro a milímetro hasta verlo por completo:Sus colmillos alcanzan los veinte centímetros perfectamente,es casi tan alto como yo.Antes de que pueda reaccionar,Rosse se escapa medio a rastras,algo que me sorprende y a la vez me inquieta,porque hasta ella misma sabe que si permanece ahí en su estado no aguantará mucho tiempo.
Sin embargo,yo permanezco en mi sitio,bloqueada,como si se me hubiese olvidado como correr.La mutación avanza hacia mí,mostrándome la profundidad de su boca,mientras yo retrocedo con la espada extendida.Un sonido me desconcierta,un tintineo,un paracaídas que se aleja.Un rayo ilumina su destinatario:Distrito 2.
-Ellery,este sería un buen momento para mandarme algo-murmuro retrocediendo sin apartar la vista de la bestia y de sus ojos inyectados de sangre,que contrastan con su pelaje blanco.Retrocedo tanto que tropiezo con un árbol,cayendo a sus pies.El miedo me paraliza cuando el lobo está a apenas dos metros de mí,las lágrimas mojan mis ojos.Voy a morir por las mismas bestias que mataron a Jake.

Prométeme que vencerás...

La voz de Jake se reproduce en mi cabeza sin que pueda evitarlo,pero es bienvenida.El problema llega cuando comprendo el sentido de la frase en este momento:Para vencer,debo matar a la mutación.
Y lo hago sin pensar,cuando esta se avalanza sobre mí y mi espada se hunde en su pecho.Cae al suelo,resistiéndose,intentándo arrancársela desesperadamente.En uno de sus intentos,su garra se encuentra con mi pecho y lo araña con fuerza,que no tarda en sangrar.Duele,pero aún debe dolerle más a él cuando la espada se rompe y el metal permanece en su interior,sin posibilidad de liberarse de él.
Poco a poco va debilitándose,y finalmente muere.
Me levanto lo más lento que puedo y cojo lo que queda de la espada.Está rota,inservible.
Entonces una explosión.
No un cañonazo,una explosión provocada...y fuego.

Rosse ha recibido explosivos.Explosivos que cuelgan de su cinturón cuando vuelve a donde estoy.


Supongo que aquí es cuando comencé a contar la historia,y cierto es que he pasado por mucho para llegar a donde estoy.Pero cuando ves que tus posibilidades de derrotar a la muerte son nulas,solo te queda correr.


Suelto la espada de mi mano sangrante y la lanzo al suelo.No me servirá de mucho allá a donde voy.Ya puedo ver la satisfecha mirada de Rosse en su rostro.En mi mente se dibuja el momento de mi cañonazo,y el coronamiento de Rosse como la vencedora de los quintuagésimo primeros Juegos Del Hambre.No me servirá de nada luchar en mi estado.
Pero entonces,¿Porqué corro?
Para hacerme más dolorosa mi muerte,tal vez.Las ramas golpean mis heridas abiertas,manchándolas de espesa sangre.Es una sensación muy desagradable y dolorosa.Pero debo aguantarme las ganas de tirarme al suelo y gritar de dolor si quiero llegar a la cueva subterranea.Tal vez pueda permanecer allí lo suficiente como para mejorarme.¿Pero,y si no ocurre?Estaría a merced de mi dolor,tarde o temprano moriría de hambre o frío,o ambas.Me acabaría encontrando Rosse,y me mataría.Pero si estoy huyendo de esta manera es porque aún tengo,en lo más remoto de mi ser,una esperanza en ganar estos juegos.Recuerdo las palabras de mi mentor"La victoria está en tu mente,preciosa",y su palmada en la frente.De repente,le hecho de menos.Pero ese pensamiento se desvanece cuando mi única salvación aparece oculta tras las rocas:la cueva subterránea.Me deslizo entre los estrechos huecos que anteriormente pude hacer para esconderme de Drake y los cierro con las rocas que dejé apartadas,y automáticamente siento como el agua me empapa por completo.Chapoteo hasta llegar a las rocas salientes y me quedo quieta,muy quieta.Puedo escuchar las gotas de agua cayendo de las estalagtitas,y su respectivo eco,el silbido del viento colándose entre las piedras,el aleteo exterior de los sinsajos y los latidos acelerados de mi corazón.
Con Rosse herida en la pierna,he podido huir de ella,pero no por mucho tiempo.Es fuerte,tiene muchos patrocinadores, y es una profesional.La verdad,podría haberme sentado y dejado que me matara.Pero no,todo el distrito 5 está esperando tener un vencedor desde hace años,y lo van a tener.

Me quedo quieta,pensando en todo lo que puedo hacer en esta situación,pero mi mente se bloquea gradualmente a medida que las explosiones se acercan.Pero eso no me impide escuchar un tintineo.
Está aquí dentro,colcando del techo.¿Porqué lo escucho ahora...?Descuelgo el paracaídas y me fijo en la tela:9-5.Distrito 9,Distrito 5.La nota del mentor de Jake no era para él,era para mí.Una nota es lo que recibo en primer lugar.
Con la letra de William.

La vida muchas veces te golpea,pero no por ello debes ocultarte.Debes demostrarles que eres una VENCEDORA,y que no pueden acabar contigo tan facilmente.

En segundo lugar,un cuchillo enfundado y una advertencia.

Esencia de Anamera.Rozar y listo.E~

Una última oportunidad para vencer a Rosse.Un arma con la que con solo rozarla puedo vencerla.Guardo ambas notas en mi chaqueta y agarro con fuerza el cuchillo a la vez que la luz de las explosiones se cuela por la cueva y yo avanzo por ella hacia la salida.Rosse no será tan tonta como para estallar uno con ella cerca.
Escucho el agua envolviendo sus pies,su figura asomarse a la lejanía.Después,lo único que veo es la luz de los rayos y el agua golpeándome en la cara.Me quedo a unos metros de la salida y preparo el cuchillo,en alto cuando ella aparece.
Tiene su último explosivo en la mano.
-Acabemos cuanto antes-dice levantándolo.
-Estoy de acuerdo


Tres


Dos


Uno


Y ambas disparamos.


Mi cuchillo se clava profundamente en su hombro,la esencia de anamera no debe tardar en hacer efecto en su sistema nervioso.

Y ella falla:su explosivo choca con una rama próxima y explota sin llegar a alcanzarme.

Lo que me alcanza es un arma que no vi antes en ella,sino en Drake,uno de los cuchillos que se quedaron en la cueva...y se clava en mi pecho.

Y suena el último cañonazo de los Quintuagésimo Primeros Juegos Del Hambre.



Este no es el último capítulo.El último estará contado desde la vencedora.¿Rosse Olivier o Selene Black?La suerte está solo de parte de una de ellas...
Capítulo 15:Vencedora.

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